Casa del Árbol

Nuestra hija va a la casa del Árbol desde septiembre. Estamos contentísimos y ella también. Se nota que tienen pasión por lo que hacen, la niña se lo pasa genial y les tiene mucho cariño. Además ambas son psicólogas y hablan perfecto inglés. Tratan a los peques con mucho amor y respeto, no se nos ocurre lugar mejor donde dejar a nuestra hija.

Hace un año que nuestra peque va a la casa del árbol cada semana. Le encanta ir cada vez y se siente muy bien ahí con Caro y Ivonne. Son muy atentas y profesionales, comunican mucho con los padres y estamos muy contentos con el servicio. Nuestra peque aprende un montón de cosas y como hay pocos niños, parece a une familia. El lugar está dedicada a los niños, todo bien adaptado y seguro para ellos.
También ofrecen un servicio más flexible que las crianzas más grandes. Recomendamos la casa del árbol con mucho ánimo!!

Para nosotros escoger la Casa del Árbol ha sido un total acierto! Nuestro hijo se adaptó muy bien y está encantado de ir, y nosotros felices por el y muy tranquilos de confiar en Carolina e Ivonne. Ambas son grandes profesionales y cuidan a los niños con total respeto y cariño, y eso se nota muchísimo. Sin duda lo recomendamos a todos los padres que estén buscando esta opción para los primeros años de sus hijos :)

Hemos tenido a nuestro peque Thiago casi 6 meses en casa del Arbol, y ha ido genial. Caro e Ivonne son muy muy majas, cálidas y profesionales. El peque les ha cogido muchísimo cariño, y ha progresado en muchísimas áreas desde que está con ellas. El ambiente es de mucho respeto hacia los niños, y se divierten mucho! Completamente recomendable.

Un segundo hogar para mi peque y compañeras de crianza para nosotros.

Estuvimos un poco más de dos años y, el hecho de que sean madre e hija, ambas buenas conocedoras de las distintas etapas del desarrollo de los niños, les da eso que buscamos quienes que preferimos dejar a nuestros peques con una madre de día (calidez, mucha atención, segundo hogar...), y lo que nos gusta a los padres más informados pero muchas veces igual de perdidos, unas compañeras de crianza muy profesionales. Siempre vi que tenían suficiente respeto para aprender el estilo de cada peque y la suficiente formación y experiencia para aconsejarte algo si les preguntabas o tenías dudas.
Las llevamos siempre en nuestro corazón y aún les llamamos para saludar o comentarles cositas de crianza!

Al tener que pasar a P3 yo tenía un poco de miedo por el cambio que el niño tendría que hacer de pasar de un grupo tan reducido y de estar tan cuidado, a los grupos grandes del cole. Pero nada más lejos de la realidad, es un niño que lleva la mochila de amor y confianza bien cargada y todo ha ido estupendamente! Además cada vez hay más coles que apuestan por una crianza más respetuosa.